¿Cómo hacer un diseño gráfico?

Cuando piensas con detenimiento en cómo hacer un diseño gráfico, también debes considerar el proceso detrás del mismo. Todos tenemos a nuestro alcance las herramientas necesarias para plasmar de forma visual una idea creativa que queremos comunicar. Para ello, es necesario entender los aspectos relacionados con la materialización de la idea y cómo ejecutarla.

Entendiendo el proceso comunicativo

Antes que nada, es importante comprender que la creación de un logo, revista o web tiene un trasfondo expresivo. Esto significa que existen conceptos vinculados de forma abstracta o representativa con el diseño que deseamos compartir. La intención primordial es encontrar una forma efectiva, cautivadora y visualmente atractiva para transmitir un mensaje claro.

La labor de todo diseñador profesional o aficionado consiste en un proceso creativo, analítico y comunicacional. De esta forma, tienes que encontrar el camino adecuado y usar las herramientas a tu disposición para lograr un resultado profesional. Haciendo uso de tus conocimientos, experiencia, talento e inspiración, encontrarás una solución puntual para transmitir efectivamente tu idea.

De la investigación a la conceptualización

En principio, necesitas comenzar por recopilar información que te pueda servir para llegar al concepto principal que quieres plasmar. Más que una simple recopilación, lo que se busca es procesar estos datos para hallar el propósito o intención. Este paso también sirve para identificar mejor las tendencias, comparar y estar en sintonía con lo que buscas tú y lo que necesita el cliente.

La investigación debería conducirte a identificar las ideas más atractivas que están relacionadas con el proyecto. Esta reflexión tiene como finalidad que puedas identificar con claridad aquello que más se adapta a lo que quieres expresar. En este punto, puedes apoyarte en la lluvia de ideas (brainstorming), las analogías, los mapas mentales, entre otros métodos.

Fundamentos de la composición

Para comprender mejor cómo hacer un diseño gráfico si no tienes estudios o cursos, hay que recurrir a elementos fundamentales del diseño. En esta categoría encontramos aspectos básicos que alguna vez hemos escuchado, como por ejemplo:

• Paleta de colores. Haciendo uso del círculo cromático moderno, mediante el amarillo, azul y rojo se producen las tonalidades secundarias o intermedias. Es una herramienta muy útil y relevante en la estética de un concepto artístico. Por lo general, puedes usar la app gratuita Paletton para facilitar este trabajo u optar por colores opuestos dentro del círculo.
• Las líneas. Otro elemento que sirve para expresar estados de ánimo y emociones son los diferentes tipos de líneas disponibles. Puedes usarlas a modo de guía como una especie de plantilla para orientar la estructura final de tu composición. Son bastante útiles para establecer el mood general mediante la organización, la elección de fuentes y la delineación de las formas.
• Las formas. La percepción de las cosas representa una parte importante de la interpretación de un diseño en particular. Existen formas geométricas y orgánicas que pueden tener líneas definidas o no para transmitir una idea. Dentro de las posibilidades del diseño gráfico, puedes optar por figuras positivas o negativas que complementen tu intención.
• Las escalas. La función de este elemento consiste en crear un punto focal para guiar la observación hacia donde queremos. Alterando la relación existente entre las partes de una composición, puedes generar impacto y sentido para la audiencia. Esto también te permite crear una jerarquía visual tanto de las formas como del contenido para resaltar lo más esencial.

Herramienta online “Paletton” muy útil para crear combinaciones de color, a través de su círculo cromático. Puedes obtener colores complementarios, monocromáticos, análogos y triádicos.

Usa bocetos para saber cómo hacer un diseño gráfico profesional

Dentro del proceso de cómo hacer un diseño gráfico, resulta fundamental pasar del concepto a la materialización del mismo. Además de tener en cuenta los aspectos básicos, hay que considerar el propósito de lo que quieres crear. Más allá de un diseño bonito y complicado, la comunicación efectiva de la idea pasa por algo comprensible.

Los bocetos o borradores sirven como un plano de construcción para ubicar de forma coherente las imágenes, objetos y tipografía que emplearás. Recuerda que se trata de una composición, donde todo está relacionado entre sí para dar a entender una o varias ideas. Esta es la parte de ensayo y error que te permite evaluar si la armonía o estética cumplen su función.
No importa si sabes dibujar o no, esta maqueta te permite cuidar de cada elemento y ubicarlo según su preponderancia. Aunque cada uno es importante, lo fundamental es lograr que la composición tenga el resultado que esperas. Este proceso de experimentación sirve para determinar si el diseño general requiere ajustes o no.
Asimismo, este procedimiento te da la posibilidad de jugar con el espacio, la alineación y el contraste de diferentes formas. Tomando en cuenta las sugerencias del cliente o de alguien con más experiencia en el campo, puedes definir mejor el diseño final.

Elaboración del arte final

El último paso relacionado con cómo hacer un diseño gráfico consiste en tener un producto terminado con acabado profesional. En esta etapa dispones de una versión casi depurada de la idea que quieres comunicar a la audiencia o a un cliente. Para ello, toma en cuenta los fundamentos de la composición y otras características esenciales de este proceso creativo.

Durante la finalización, es importante que trates de crear tu propia paleta de colores en función de la unidad del concepto. En caso de que trabajes con imágenes, puedes aplicar colores complementarios asociados con la misma. Este trabajo debe estar enfocado en proyectar las sensaciones e ideas para que en conjunto expresen la coherencia deseada.
Por otra parte, la inclusión de textos amerita la implementación de una tipografía legible y atractiva. Cada mensaje no tiene la misma importancia, por lo que la jerarquización revelará este aspecto con más detalle. Los tamaños, estilos y formas de las palabras deben complementarse para ser fácil de comprender mientras dan mayor estética al diseño.
En la etapa final deben considerarse aspectos como la alineación, el contraste y el espacio para obtener un mejor resultado. Esto implica ordenar mediante ejes invisibles los elementos más importantes de la composición. La distancia entre los objetos y cómo se diferencian entre sí, evita un aspecto descuidado y poco profesional.

Programas gratuitos disponibles online

Para saber cómo hacer un diseño gráfico de calidad, te sugerimos empezar con artes minimalistas que son más manejables. A medida que vas aprendiendo y dominando algunos programas o técnicas, puedes hacer composiciones más complejas. Lo esencial radica en apoyarte en tu creatividad, un proceso que te sirva de guía y la autocrítica esencial para seguir progresando.

Para facilitarte el trabajo de cómo hacer un diseño gráfico, puedes apoyarte en aplicaciones gratuitas disponibles en la red. Entre ellas, podemos mencionarte Canva, Pixlr, Piktochart, Easelly y PickMonkey. Estas apps sirven para usar plantillas, retocar imágenes o gráficos y empezar a crear un concepto desde cero.


Recuerda que estas herramientas son para probar, jugar, aprender y divertirse diseñando, sin complicaciones técnicas. Una vez que adquieras algunos conocimientos prácticos deberás experimentar con programas más avanzados. Adobe Photoshop, Illustrator o InDesign te ayudarán en esta tarea dependiendo del tipo de diseño que desees crear. Si deseas ampliar información sobre los distintos programas de diseño más utilizados a nivel profesional, puedes visitar este artículo en nuestro blog: Programas de diseño gráfico.
Sabemos que no te vas a convertir en diseñador de la noche a la mañana. Pero no pierdas la motivación, no dudes que tienes el talento y las herramientas para mostrar tu potencial creativo.